Ganadería Gorrello: “El confort de las vacas es dinero para el ganadero”

0
1663

La Ganadería Gorello instaló recientemente un robot de ordeño Lely Astronaut A5. Llegar al tercer ordeño, la comodidad de los animales y la falta de mano de obra fueron los motivos principales por los que los titulares de la Ganadería Gorrello, Jairo Álvarez y su madre Olga Arruñada decidieron cambiar la sala de ordeño por el robot. Su padre, Ricardo Álvarez, ya jubilado, fue el que animó a su hijo a dar el paso con vistas de futuro. Son una ganadería familiar con 140 animales, 79 vacas adultas, recría y un toro.

-¿Cuándo decidió que su futuro estaba en la ganadería?

-Estudié Perito Agrícola en Lugo. Cuando me faltaban dos años para finalizar la carrera a mi padre le dio un infarto y compatibilicé el trabajo en la granja con los estudios. Mi idea siempre fue venir a la granja, quizá no tan pronto porque las circunstancias lo aceleraron, pero tenía claro que mi futuro era la ganadería, además soy un apasionado de los concursos, mi vida siempre se ligó a la raza Frisona y llevo incorporado siete años.

-¿Cuál es su producción? ¿Ya notan el cambio a robot?

-Llevamos con el robot apenas dos semanas y aún estamos sintiendo el cambio. Actualmente estamos en 37 litros por vaca y día con 3,90/4 de grasa y 3,40/3,47 de proteína. Los primeros días de la incorporación al robot hay que tener paciencia con los animales y echarle horas. Estoy encantado, los animales funcionan muy bien y en tan poco tiempo ya están ya con 2,8 ordeños. Ahora ya arrimamos retrasos mañana y tarde, pero los primeros 15 días estuvimos en la nave metiendo animales para deshacer la franja horaria que ellas tenían de ordeño mañana y tarde.

-Háblenos del sistema reproductivo.

-Trabajamos con la empresa veterinaria Serivet, programamos los animales a partir de los 60 días para hacer una lactación a los 365 días, año natural de la vaca. Trabajamos con semen sexado y carne, seleccionamos los mejores animales. Como no queremos crecer cruzamos últimamente por charolés por facilidad de parto y fertilidad. El resto semen sexado con las vacas que más nos gustan.

-¿Cuál es la alimentación de los animales?

-Se trata de una mezcla especial unifeed de Agropres especial para robot, soy su único cliente en este tipo de nutrición, cambiamos la mezcla húmeda. En la alimentación de la recría trabajamos con Nanta, con Omar Martínez, y realizamos pesadas al nacimiento y destete para saber el desarrollo de las terneras desde que nacen hasta la inseminación. Sembramos entre 15 y 17 hectáreas de maíz, que vendemos a Agropres y les vendemos según calidades por materia seca y almidones.

-¿Qué ha notado con el cambio a robot?

-Que los animales están muy tranquilos, cada animal hace su rutina a lo largo de las 24 horas. Para mí de momento hasta que no coja las pautas de las franjas horarias ya que es pronto el único inconveniente que tengo es a la hora de arreglar las camas, porque antes se levantaban todos los animales para ir al ordeño y tenía las camas libres, ahora tengo que ir levantándolas. Nos adaptaremos. Creo además que los cubículos anchos y cómodos las camas de arena son fundamentales, que las vacas estén cómodas es dinero para el ganadero.

-¿Cómo evolucionó la nave?

-Tenemos una nave para las vacas en producción y la recría se pasa a otra nave cuando la gestación está confirmada. Ahora contamos con una nave con buena luminosidad y bien ventilada pero con los años ha ido sufriendo muchos cambios. Desde hace siete años se ha incorporado las arrobaderas. La ampliación de la nave se hizo en forma curva porque no podíamos utilizar terreno expropiado por la carretera. También cambiamos las camas de sentido, pasamos a dos líneas de 18 cubículos cara con cara con pasillo. Antes la nave estaba cerrada completamente con ventanas y fuimos tirando tabiques, los últimos en el confinamiento, y aún tenemos pendiente sacar la sala de ordeño.

-¿Cuáles fueron los principales motivos por los que cambiar a robot de ordeño?

-En primer lugar por las vacas, tenemos un flujo de 3,9 o 4 litros por minuto, son muy blandas, tiraban mucha leche en los cubículos y había algo de mamitis, con el robot están mucho más cómodas y tranquilas. En segundo lugar intentar llegar al tercer ordeño, todo avanza, cada vez los márgenes son más pequeños y hay que buscar más producción para poder sobrevivir. Y en tercer lugar por falta de mano de obra, mi padre está jubilado y mi madre tiene 62 años.

-¿Por qué eligieron Lely?

-Por dos razones: por fiabilidad, ya que llevan muchos años trabajando el sistema de ordeño robotizado y porque la mayoría de ganaderos que conozco tienen Lely y están muy contentos con el servicio técnico y con la forma de trabajar del robot. Elegimos un Lely Astronaut A5 con todos los extras, solo le falta la puerta selectora con vistas a corto plaza a hacer un área de separación.

-¿Qué planes tiene de futuro?

-La idea es ver cómo funciona la granja, y en un plazo de 5 o 6 años pasarnos a una nave con dos robots y dejar esta para recría y vacas secas. Si hay que crecer esa es nuestra idea, vamos viendo y andando, de todas formas dejamos todo preparado para incorporar un segundo robot. Ahora disponemos de más datos para la gestión de la granja, lo que también ayuda a una mejor gestión y toma de decisiones.