El negocio de la franquicia en masymas cerró el ejercicio 2017 consolidando su crecimiento en el 10%. El peso que las franquicias tienen en la compañía es muy destacado ya que supone un 25% de su superficie comercial y un 10% sobre las ventas. Su ámbito de actuación está centrado en Asturias, Lugo, Cantabria y León.
En 2017 se abrieron cinco nuevas tiendas en varios puntos de Asturias con una rentabilidad media de entre el ocho y el nueve por ciento. Además, la compañía ha comenzado a llevar a cabo un proyecto innovador con la actualización del software a nivel de franquicia, que supone la incorporación de un sistema integrador de fidelización, basado en actuaciones personalizadas y dirigidas a las necesidades de los clientes.
En Gijón se acaba de inaugurar una nueva tienda -ubicada en la calle Velázquez, número 20- y el pasado mes de marzo se inauguró un Minymas en Cangas de Onís. Con estas dos nuevas incorporaciones la compañía cuenta ya con 52 franquicias con dos enseñas, de las cuales siete se establecen como MyM (tiendas de más de 400 m2 que incluyen todas las secciones de venta asistida de supermercado) y 45 minymas (tiendas entre 200 y 400 m2, de libre servicio en las que se refuerzan las secciones de Frutería y Panadería).
La franquicia de Hijos de Luis Rodríguez consolida pequeños supermercados y moderniza las tiendas tradicionales de zonas rurales, dotándolas de las herramientas necesarias para realizar su actividad con un nuevo modelo de gestión, más moderno y actualizado.
La consejera delegada de Hijos de Luis Rodríguez, Eva Rodríguez, indicó que como objetivo para 2018 “queremos expandirnos a la Comunidad de Castilla y León, sin descuidar posibles aperturas en el Principado de Asturias, donde este modelo de franquicia es más conocido y cada vez nos llegan más propuestas de nuevas aperturas que debemos estudiar”.
Nueva franquicia en Gijón
Gijón y concretamente en el área de Montevil, cuenta ya con su segunda franquicia Minymas. En esta ocasión, es la emprendedora Belén García, quien se embarca en la apertura de este nuevo establecimiento, que dará empleo a dos personas. La tienda cuenta con una sala de ventas de 170 m2, con un pequeño almacén y oficina de gestión integral.
Esta tipología de negocio es una oportunidad para que jóvenes emprendedores/as puedan desarrollar un pequeño negocio con la garantía y la solvencia de una empresa que cuenta con más de 85 años de experiencia en el sector. También es una buena opción para los que ya disponen de un establecimiento de alimentación y quieren mejorar la posición en el mercado de estos pequeños y medianos negocios minoristas, aportando un desarrollo empresarial importante, así como asistencia comercial y asesoramiento continuo desde el inicio del proyecto común.
La informatización del negocio aporta una mayor visión y control global de la empresa, lo que permite la adecuada toma de decisiones del franquiciado ante posibles eventualidades y variaciones del sector, dotándolo de la suficiente capacidad de reacción. Una decisión de futuro para emprendedores/as que apuestan por el crecimiento de la región.