El Auditorio Príncipe Felipe de Oviedo acogió la Asamblea General Ordinaria de Caja Rural de Asturias. El presidente de la entidad, José María Quirós, así como su director general, Fernando Martínez atendieron a los medios de comunicación para transmitirles la situación del último ejercicio de la entidad bancaria así como las perspectivas para el presente año.
Quirós calificó el ejercicio 2015 como “aceptable”, ya que con los tiempos “difíciles” que corren los resultados son algo superiores a los del anterior año y “somos prudentes”. Lo que ha reconocido es que actualmente hay más disponibilidad económica para el consumo familiar así como las empresas encuentran más facilidad para acceder a créditos baratos. El presidente de Caja Rural de Asturias afirmó que la inversión está creciendo “ligeramente” pese a la incertidumbre política y situación europea.
Caja Rural de Asturias apuesta por una apertura para acoger clientes tanto personales como empresas “no sólo del medio rural”.
En cuanto al futuro de las oficinas de la entidad bancaria existe un plan a tres años en el que se realizarán aperturas de oficinas selectivas en poblaciones cercanas a polígonos industriales buscando la atención especializada al cliente. En los próximos tres años se prevé la apertura de cuatro oficinas.