Las instalaciones de Yeguada Finca Maeza acogieron a muchísimo público que acudió con la esperanza de ver en la jornada de clausura del CSI3* un buen espectáculo deportivo. Y el Gran Premio Maeza no les defraudó. Al contrario, la prueba mantuvo la tensión típica de los grandes premios a lo largo de los recorridos de sus 50 participantes y subió de intensidad en un desempate en el que los seis clasificados buscaron desde el primero hasta el último obstáculo, la victoria.
Y decisivo fue el último obstáculo, el vertical de Maeza, porque en él derribó el último participante en el desempate, el jinete donostiarra Jesús Garmendia, cuando tenía el triunfo a su alcance con “Callias”. Fueron el único binomio que bajó de los 40 segundos, pero la llegada al último obstáculo tras una larga e intensa galopada, no fue la mejor y se produjo el derribo que privó al español de la victoria.
En el barrage, el cero más rápido fue el de Luca María Moneta, jinete italiano residente en Francia, que suplió con su experiencia en la alta competición, la inexperiencia de su yegua, “Jolie Coeur d’Avril”. Sus 40’50 segundos le dieron el triunfo por delante de Eduardo Álvarez Aznar, que empleó 41’45 con un “Enjoy de la Mure” que saltó brillante, pero al que le faltó más ritmo para superar al italiano.
En tercera posición se clasificó otro jinete español, José Bono, que ha confirmado en Maeza las buenas expectativas generadas en torno a su tordo “Alí Babá HT”. El binomio de Hípica de Toledo empleó 41’87 segundos en su recorrido.
También hicieron cero en el desempate, el portugués Duarte Seabra, cuarto con “Dourados 2” (43’39) y la española Carolina Aresu con un poderoso “Domperignon” (44’00).
La directora de Yeguada Finca Maeza, Cruz Maestre, fue la encargada de entregar el trofeo al ganador del Gran Premio, Luca María Moneta, cerrando el acto, la jornada y el concurso, la Banda de Gaites Llariegu con los acordes del himno de Asturias.
Al término de la prueba, Luca María Moneta calificó el Gran Premio como “muy delicado, muy técnico, pero no muy grande. Para mí ha sido una suerte, porque mi yegua no tiene mucha experiencia, nunca había corrido una prueba de esta categoría, pero tiene un buen feeling conmigo y nos hemos compenetrado bien”. Moneta resaltó que “las instalaciones de Maeza son una maravilla, aquí la naturaleza es magnífica, la temperatura para el caballo es genial y las personas son muy abiertas”.