Vitoriastur abarca todo el proceso productivo de la ternera. Desde la cría en su propias ganaderías, hasta su distribución y venta en tiendas especializadas. Su propietario, José Manuel Menéndez, explica los inicios de esta empresa fundada en 2014. “Teníamos nuestra explotación ganadera y decidimos abrir una comercializadora de carne con un punto de venta para saber de primera mano qué demandaban los clientes”. El éxito de la iniciativa fue en aumento y, después de abrir una carnicería en Oviedo, decidieron dar el salto fuera del Principado, a Madrid y Mallorca.
En cuanto a las ventajas de pertenecer a la IGP Ternera Asturiana, Menéndez afirma que “le da un valor añadido al producto. Hay unos controles preestablecidos y una trazabilidad que al final el cliente valora”. Para el ganadero y distribuidor, “cuando un sello te identifica, el carnicero siempre lo prueba”. El 50% de las reses de Vitoriastur “son de ganadería propia. Luego, también tenemos ganado para cebo y trabajamos con otros ganaderos fieles a nuestra filosofía”.
Para Menéndez, la Ternera Asturiana “es una carne muy jugosa y muy tierna. Son animales jóvenes con muy poca grasa y que valen para todo tipo de público. En mercados donde tenemos presencia estamos funcionando muy bien”. En cuanto a la marca IGP Ternera Asturiana, Menéndez señala que “mientras estemos unidos ganaderos, distribuidores y puntos de venta, tendremos futuro”. En Vitoriastur apuestan por razas autóctonas “como la Asturiana de los Valles y la Asturiana de la Montaña, así como sus cruces entre ellas”.
Además, los cebos con los que trabajan “son naturales y a base de harina de maíz”. Para Menéndez, “además de la vaca, el entorno y el ecosistema son muy importantes en nuestro negocio. Solemos traer tanto a carniceros como a consumidores finales a nuestras instalaciones y todos ellos se quedan maravillados y sorprendidos del trabajo que hacemos y de lo bien cuidados que están nuestros animales”.