La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) denuncia que las prácticas monopolísticas de la multinacional Associated British Foods en el sector remolachero-azucarero español han disparado los precios del azúcar a los consumidores y han hundido los de la remolacha al agricultor. Así se desprende del estudio comparativo realizado por los Servicios Técnicos de COAG durante el periodo 2015-2020, sobre la evolución de los PVP por kilo de azúcar y el precio por tonelada de raíz que reciben los agricultores por parte de Azucarera Iberia por la remolacha que entregan en sus fábricas de la zona norte (Castilla y León, Rioja, País Vasco y Navarra), (este último sin tener en cuenta las ayudas estatales puesto que lógicamente estas no son sufragadas por la industria). Conviene tener en cuenta que al margen de ACOR, cooperativa participada por los propios agricultores suministradores y que por tanto también participan de sus beneficios, Azucarera Iberia es la única industria que moltura remolacha en España.
En la campaña 2014/15, inmediatamente anterior a la primera del acuerdo marco interprofesional 2015/16-2019/20 (AMI) que ha estado vigente durante estos últimas cinco campañas, Azucarera Iberia abonó a los cultivadores 37,36 euros por tonelada de remolacha (€/t) en tanto que los consumidores pagaban a 0,85 €/kg el azúcar extraído de esa misma remolacha (ver gráfico página 1.). Desde esa campaña los consumidores han visto encarecerse progresivamente el coste de sus compras de azúcar más de un 13% (hasta los 0,96 €/kg estimados en la campaña 2019/20) pero, sin embargo, y por muy sorprendente que pueda resultar, Azucarera Iberia ha hundido el precio abonado a los remolacheros que le abastecen de remolacha en más de un 25,5% (hasta llegar en la campaña 2019/20 a bajar hasta los 27,80 €/t percibidos de forma generalizada).
“Con independencia de la parte de responsabilidad que puedan tener el resto de agentes de la cadena, en un contexto en el que el precio del azúcar pagado por el consumidor no para de crecer, se constata que la multinacional británica no se contentó con el esfuerzo que los remolacheros hicimos asumiendo una bajada del 13% en el precio de la remolacha para las cinco campañas del AMI, (un acto de responsabilidad en beneficio de todo el sector). Además, decidió unilateralmente y de forma totalmente injustificada incumplir el Acuerdo Marco Interprofesional (AMI), rebajando hasta el 25% el precio consensuado entre dicha empresa y los remolacheros”, ha subrayado el responsable del sector remolachero de COAG, Fernando García. En base al análisis realizado por COAG, el responsable remolacha de esta organización considera que “frente a la industria azucarera los remolacheros somos el eslabón más débil, expuesto y penalizado por la cadena de valor que determina el precio final del azúcar al consumidor. Y ello pese a que hablamos del eslabón que asume los mayores riesgos, por hallarse sometido a la actividad prácticamente monopolística de Azucarera y porque la producción de remolacha es una actividad al aire libre, expuesta a los contratiempos de mayor dificultad de gestión (factores meteorológicos, plagas, enfermedades, volatilidad de insumos, etc.)”. Y alerta: “si la industria se empecina en ofertar unas condiciones que en la mayor parte de los casos ni siquiera cubren los costes de producción, ( ni sumando las ayudas institucionales al cultivo), está poniendo en riesgo la continuidad de todo el sector remolachero-azucarero nacional”.