En el ejercicio 2017, Caja Rural de Asturias ganó 27,93 millones de euros, cifra que supone un incremento del 34,81% respecto al obtenido el año anterior y representa un ROE del 7,14%. La entidad obtuvo en este mismo periodo un resultado recurrente de 25,7 millones de euros, un 24,19% superior al del 2016. Este resultado, manteniendo la estrategia de prudencia y fortalecimiento de la solvencia que históricamente ha caracterizado a la Caja, permitirá elevar las reservas en 22,53 millones de euros, retribuir el capital aportado por los socios, bonificar sus costes operativos y dotar a la obra Social de 2,8 millones de euros de los que el 50% serán destinados al patrimonio de la Fundación Caja Rural de Asturias.
Con fondos propios de 391 millones de euros, la solvencia de Caja Rural de Asturias en términos de capital ordinario de nivel 1 (CTE 1), que refleja el nivel de recursos propios de primera categoría, se situó en el 20,38%, entre los más elevados del sector financiero.
La Caja, con su modelo de banca local y cercana, mejoró los resultados del año anterior e incrementó su cuota de mercado. En el año 2017, un total de 22.263 personas iniciaron su actividad financiera como nuevos clientes. De ellos, 18.504 son economías domésticas y 3.759 son autónomos y empresas. Estas cifras denotan el dinamismo de la Entidad y una presencia cada vez mayor en el mercado.
En cuanto al volumen de negocio, 5.362 millones de euros, cabe destacar la cifra de depósitos captados que asciende a 3.278 millones de euros, un 7,85% más. Los créditos se elevaron un 3,9% respecto al año anterior alcanzado la cifra de 2.184 millones de euros el crédito en vigor concedido. Esta evolución se valora positivamente dado el retroceso que un año más se ha producido en el sector financiero a nivel nacional donde el crédito en vigor ha bajado un 2,49%.
La Caja concedió durante 2017 un total de 14.373 operaciones crediticias por un importe total de 342 millones de euros que han proporcionado la necesaria financiación a particulares e instituciones y, especialmente a las empresas, donde la inversión superó en 2017 los 135 millones de euros para financiar a este segmento.
El índice de morosidad, al cierre del ejercicio 2017, se situó en el 4,09%, inferior al 5,55% del año anterior y alejado del 7,8% de la media del sector financiero al final del ejercicio.
En cuanto a los márgenes, el de intereses y dividendos registró un importe de 77,25 millones, un 1,33 menor al del mismo periodo del año anterior. El margen bruto ascendió a 118 millones de euros, cifra que supone un aumento interanual del 18,59%.
Caja Rural de Asturias incrementó un 25,55% más el total de los recursos gestionados de clientes que figuran fuera de su balance hasta superar la cifra de 431 millones de euros, destacando el 41,12% de crecimiento anual de los saldos gestionados en Fondos de Inversión, producto en el que la Caja está alcanzado un alto grado de especialización. El crecimiento en Banca Seguros fue durante el 2017 del 15,40%.