La Asociación de Leche Ecológica Certificada de Asturias (ALECA) es la agrupación de ganaderos y elaboradores lácteos ecológicos asturianos certificados según RG (EU) 2018/848, repartidos por toda región. Las pautas marcadas desde Bruselas así como nuevos proyectos emergentes de leche asturiana ecológica hacen valorar esta opción ante la incertidumbre de futuro marcada por la subida de los costes de producción y los precios de la leche convencional.
-¿Cuándo y por qué nace la Asociación?
-La Asociación empieza a gestarse ya en el 2015, mediante la agrupación de ganaderos/as y elaboradores lácteos ecológicos certificados según RG (EU) 2018/ 848, repartidos por toda la geografía asturiana. Debido a la escasa información del sector lácteo ecológico, se creó una red conjunta de ayuda en procedimientos, trámites, información sobre rutas de recogidas, conexión con empresas lácteas ecológicas, alimentación, sanidad y cualquier tema que pudiera ser necesario para empezar su actividad y/o optimizarla. Al final se suele tener los mismos problemas al empezar y entre los conocimientos de todos/as se iban solucionando. Cuando ya se fueron conociendo y compartiendo objetivos en común, se tomó la decisión de formalizarla en julio del 2018.
-¿Con qué número de socios cuenta actualmente?
-Para ser socio de ALECA, es necesario estar inscrito en el Consejo Regulador de la Producción Ecológica de Asturias. (COPAE). Actualmente se cuenta con 23 socios y 6 más que colaboran sin estar en la Asociación.
-¿Cuáles son sus objetivos?
-Los objetivos principales son fomentar la ganadería ecológica de leche y difusión de sus bondades para satisfacer el nicho de mercado ecológico creciente y defender los derechos de los ganaderos/as ecológicos lácteos de Asturias. A su vez, cualquier problema que tengan pueden contar con todo nuestro conocimiento y apoyo para solucionarlo.
-¿Son los ganaderos conscientes de la oportunidad de producir en ecológico?
-No mucho, la falta de información en su momento y la escasez de empresas lácteas que fomentan este tipo de manejo hace que no surja un interés que les haga plantearse otro modelo de trabajo más eficiente, del que muchos disponen los recursos necesarios. El sector lácteo está teniendo muchas fluctuaciones en este momento y posiblemente vaya a hacer falta más leche ecológica, con lo que animo a los productores a convertirse y tener un valor añadido, que le permita vender la leche tanto a convencional como a ecológico y beneficiarse de las ayudas del Pacto Verde Europeo. Además, existen ganaderos eco próximos a la jubilación, y en Galicia y Cantabria, donde operan las empresas lácteas ecológicas no se esperan incorporación de ganaderos eco de leche.
-¿Qué ventajas tiene este sistema de manejo?
-El productor se ve atraído inicialmente por el precio de la leche que es muy superior al convencional. En la actual convocatoria se cuenta con una PAC a mayores, con un pago de los dos años en conversión de 400 euros/Ha y 360/euros ya en ecológico con un compromiso de 5 años. Posteriormente, aparecen sus muchas otras ventajas y que van todas en cadena, donde el productor empieza a darse cuenta al año. La primera, la alimentación, que tanto encarece los costes. Con un buen manejo de praderas, se consigue disminuir la cantidad de concentrado considerablemente. Eso sí, la alimentación debe ser equilibrada. Es un arte el alimentar a las vacas de leche en extensivo, para que no sufran las enfermedades que tantos gastos ocasiona e incluso los descartes de grandes vacas. Cuando una vaca tiene una alimentación adecuada y sale al pasto, los problemas reproductivos, enfermedades en ubre, piel y articulaciones disminuyen drásticamente. Se ahorran también el tiempo de limpieza de la estabulación. El purín que genera las vacas procedentes de una alimentación ecológica reglamentaria, también produce beneficios a las praderas que ven incrementada su productividad por ser una composición diferente a los piensos convencionales, así como su limitación de 170kg/ Nitrógeno / Ha / año, que hace que las plantas futuras tengan más poder nutritivo.
-Algunos ya pastorean sus vacas habitualmente ¿tendrían menos complicaciones para la conversión?
-Prácticamente ninguna. El único cambio que se realiza es en la alimentación, pero se cuenta con las principales materias primas en ecológico y con disposición en Asturias. No se puede usar maíz que no sea ecológico, pero se cuenta con harina de maíz eco, y con forraje en ecológico. Es un poco más caro, pero es una inversión, ya que es mas suave para las vacas y con mucha palatabilidad. Luego está el manido dicho que producen menos litros, pero eso no es real, si haces una alimentación acorde, se demuestra por los controles lecheros como los animales conservan su producción e incluso no se ve alterada por el descarte de la leche ya que sufren muchas menos enfermedades. Recordar que una sola mastitis puede suponer el coste total de 250 euros o más.
-Hasta hace poco la leche ecológica asturiana se iba para fuera del Principado. ¿Cómo influirá el proyecto de Campoastur y otros que han surgido en la producción?
-El proyecto de Campoastur, con su puesta en el mercado de leche CampoBio, es una gran oportunidad para el campo asturiano y desde la Asociación apoyamos 100% la iniciativa También cuenta con un proyecto de diversificación para artesanos ecológicos que les permiten asegurar su continuidad y crear economía circular y así poder dar más salida a la leche ecológica asturiana. De momento es pronto para poder hacer una valoración de su futuro, pero todo apunta a que, con un trabajo continuo, pueda dar cabida a la recogida de más ganaderos eco y consolidarse como la primera leche ecológica de capital asturiano y español. Como veterinaria pertenezco a una Asociación internacional y mantengo contacto con veterinarios europeos de Austria, Alemania, Italia, Suiza, Holanda… y los ganaderos ecológicos allí, tienen un futuro prometedor. Por las condiciones de Asturias, yo la comparo con Austria. con los mismos estándares de calidad.
-Es momento para el que quiera apostar por la transformación, va a disponer de materia prima, ¿cree que el consumidor valora lo suficiente la producción en ecológico?
-Como todo, depende de las prioridades que tengas en la vida. Las generaciones que vienen se interesan mucho por cómo se producen los alimentos y están muy concienciadas con el bienestar animal y el cuidado del medio ambiente. Son ellos lo que deciden invertir un poco más en una “alimentación responsable”. A parte las políticas agrarias europeas desde hace mucho tiempo, desde que se empezó con la eco-condicionalidad, van encaminando al campo hacía un modelo ecológico que es el eficazmente sostenible y son los que marcan el camino, ya que España depende del cumplimento de estos requisitos para recibir los pagos y que, según Ministerio, el retraso en el cumplimiento puede producir penalizaciones a España que pueden influir en la cantidad de dinero a percibir al productor/a. Con lo que fomentar el consumo ecológico es casi obligatorio. Además, para ajustarse a los requisitos del Pacto Verde, la superficie en España destinada al ecológico debe ser del 25 %, y Asturias con un 4% de actividad ecológica es una de las comunidades mas alejadas de los propósitos europeos.