Cada año, se generan en nuestro país más de millón y medio de toneladas de residuos plásticos, de las cuales solo se llega a reciclar una tercera parte, según estadísticas del Ministerio de Transición Ecológica. Revertir esta situación y lograr una economía más circular, sostenible y respetuosa con el medio ambiente es un reto que implica una profunda transformación de los procesos productivos. Pero, además de ser una actividad que ayuda a reducir contaminación y a cuidar la naturaleza, el reciclaje de plásticos puede convertirse en una alternativa laboral. Es el caso de Jorge Fernández Ledo, gerente de Reciclados Industriales de Pravia, con sede en el concejo del Bajo Nalón. “Somos una empresa familiar compuesta por Ceferino Fernández, mi padre, y Patricia Fernández, mi hermana, y yo. Somos socios desde antes de tener este negocio. Teníamos una empresa de carrocerías de coches que fundó mi padre en los años setenta”, explica Jorge Fernández Ledo, quien desvela que “mi hermana y yo estudiamos Empresariales y, un año antes de que se jubilase mi padre, empezamos con el tema del reciclaje con palés de madera y a triturar materiales. Fui vendiendo y comprando palés poco a poco y empezamos a suministrar a Linpac, que es una multinacional dedicada a la fabricación de envases de plástico que tiene una planta en Pravia”.
Respecto a sus comienzos con el reciclaje de plástico, Fernández Ledo explica que “empecé un poco por casualidad. Un día, pregunté en Linpac si había algo más que pudiera hacer. Me comentaron que estaban tirando al vertedero unas mazacotas de plástico pet con un coste anual elevado. Así que me decidí a hacerlo yo. Compré el primer molino y empecé a triturar material. Me costó vender los primeros camiones hasta que conseguí coger ritmo”. Al reciclaje de palés y residuos plásticos se sumó la recogida de tapones solidarios y una línea de lavado. En ese aspecto, Fernández Ledo señala que “fuimos recogiendo los tapones que se acumulan como ayuda a familias con algún fin y nos los compraban en una planta de Valladolid. Entonces, vimos que el paso siguiente era hacer una línea de lavado que construyó mi padre en su taller con sus máquinas y sus habilidades”. A raíz de la nueva instalación, surgió otra oportunidad para Recipra. “Vi que había una empresa en Sotrondio, que se llamaba Nort Palet actualmente Naeco y que se dedica a la fabricación de palés plásticos. Contacté con ellos, me gané su confianza y ahora son uno de nuestros principales clientes junto con Linpac”.
Procesos técnicos
Tras afianzarse en el sector, la empresa familiar diversificó sus líneas de negocio transformando materiales plásticos como el polietileno y el polipropileno. “Fuimos abriéndonos al sector de automoción, alimentación y compuestos”, explica Fernández Ledo, quien detalla que “no hay ningún reciclador homologado en el norte de España para plásticos pet y queremos ser los primeros. Los proveedores nos han ayudado más bien poco. Son los clientes los más interesados porque son los que más lo necesitan”.
Respecto los procesos técnicos que llevan a cabo en sus instalaciones, el gerente precisa que “nosotros compramos y vendemos materiales pero también podemos hacer todo el proceso, que consiste en desgarrado, que es un triturado a tamaño grande y moler, que es un triturado a tamaño pequeño. Luego, cogemos los metales con imanes y llevamos los materiales a la balsa de lavado, se seca y se introduce en bigbags de mil kilos aproximadamente”. Además, disponen de una máquina de granza de pet alimentario, una alternativa sostenible a los envases plásticos tradicionales. “Partimos de un material limpio y lo fundiríamos pero, en pet, solo tenemos medios para hacer la etapa final, por lo que queremos ir aguas abajo y poder triturar y lavar balas de botella de pet en todas sus fases”, explica Jorge Fernández Ledo. En ese aspecto, subraya que “es un proceso muy complicado y lleva una inversión muy fuerte, pero tiene un valor añadido y una demanda muy grandes”. Para conseguir su objetivo, en Recinpra están buscando ampliar sus instalaciones. “Estamos teniendo una colaboración muy fuerte por parte del Ayuntamiento de Pravia para buscarnos una ubicación. Necesitamos un terreno para poder crecer los próximos 20 años. David, el alcalde, está haciendo un esfuerzo enorme por nosotros y apostando por Recinpra para destacar la demanda de sus productos fuera de Asturias. “Vendemos a una empresa de Navarra que hace parachoques para automoción, a fabricantes de palés en Valencia, Almería o Zaragoza y también a otra empresa de Portugal entre otros muchos”.