Caja Rural de Asturias reduce sus beneficios de 2020 un 28,25% respecto al año anterior

0
1040

Caja Rural de Asturias cerró el ejercicio 2020 con un beneficio neto de 21,91 millones de euros, un 28,25% menos que en el año anterior, tras provisionar 11 millones de euros extraordinarios para cubrir el mayor deterioro del escenario económico.

Pese a la crisis sanitaria y económica derivada de la pandemia y el escenario de tipos cero de los últimos años, el impulso comercial de Caja Rural de Asturias y el buen comportamiento de sus canales digitales hicieron posible el mantenimiento y crecimiento de sus márgenes en la cuenta de resultados. El margen de intereses alcanzó los 76 millones de euros y el margen bruto (ingresos+comisiones), superó los 100 millones de euros, un 4,17% superior al registrado el año anterior.

Principales ratios

El balance de la Caja aumentó en 2020 un 21,39%, y se obtuvo un notable crecimiento en el volumen de negocio tanto en recursos de clientes con un aumento del 12,96% como en inversión crediticia con un incremento del 6,29%. Respecto a los recursos fuera de balance, 555 millones de euros, se incrementaron también un 1,35% respecto al año anterior.

Durante el pasado ejercicio la Caja mantuvo su dinamismo e incorporó un total de 18.746 nuevos  clientes. De ellos, 14.779 personas iniciaron su actividad financiera con la Caja, 2006 nuevas empresas y 1691 autónomos.

Pese al complejo entorno económico, la Caja mantuvo la reducción de activos improductivos  y  contuvo la morosidad del conjunto de la cartera con una tasa del 2,64%. También destaca el aumentó en más de 18 puntos porcentuales de la ratio de cobertura que alcanzó el 80,57%.

La Caja está afrontando la crisis del coronavirus con elevados índices de solvencia. El capital de máxima calidad, CET1, fully loaded aumentó 2,7 puntos porcentuales hasta alcanzar el 27,51%. Con respecto a la ratio de eficiencia, 52,47%, se produjo una mejora de 3,24 puntos porcentuales con respecto al año anterior.

Financiación

La actividad de financiación mantuvo su tendencia de crecimiento relevante en términos de saldo vivo. La Caja formalizó durante el 2020 un total de 15.514 operaciones de préstamo y crédito por un importe acumulado de 482 millones de euros. La inversión productiva alcanzó los 231 millones de euros, impulsada por la financiación con avales ICO, 3.169 operaciones formalizadas, a empresas, pymes y autónomos. Parece relevante destacar el dato de número de operaciones de inversión destinadas a nuevos clientes, 4.398 operaciones, por un importe superior a los 130 millones de euros.