Caja Rural de Asturias obtuvo un beneficio atribuido de 10,09 millones de euros en el primer trimestre del año, cifra que supone un 12,49% más respecto al mismo periodo del año anterior. Un resultado que refleja una intensa actividad comercial y escasamente afectado por el impacto económico todavía incipiente, provocado por el coronavirus.
Este impacto tendrá su reflejo en el resultado con las provisiones que realizará la Entidad a partir del segundo trimestre ante el deterioro previsto de las condiciones macroeconómicas derivadas de la crisis sanitara que ha causado la pandemia del Covid-19.
En lo que se refiere a los principales ratios, la solvencia marcó el cierre del trimestre con una ratio de capital CT1 de 24,81% muy por encima de las exigencias regulatorias y que se mantiene entre las más elevadas del sector financiero. La rentabilidad sobre recursos propios (ROE) se situó en el 9,39%. En otro orden de cosas, la ratio de eficiencia de la Entidad cerró a 31 de marzo en 50,09%.
Producto de una acreditada trayectoria de buena gestión de los riesgos especialmente valiosa en tiempos de dificultad como los actuales,deriva la calidad de los activos que refleja la actividad de Caja Rural.La tasa de morase redujo en 19 puntos básicos con respecto al mismo periodo del año anterior y quedó situada en el 2,78%. Esta prudente gestión del riesgo mantuvo la ratio de cobertura en el 58,62%.
Márgenes en crecimiento
Los márgenes de la cuenta de resultados a cierre del primer trimestre crecieron a buen ritmo y demostraron la capacidad de la Caja para seguir generando ingresos recurrentes. A pesar de la dificultad del entorno de tipos, el margen de intereses sumó un total de 18.9 millones de euros, un 2,08%. El margen bruto alcanzó los 24,6 millones de euros, o lo que es lo mismo un 8,23% más.
Aumento en créditos y recursos de clientes
En cuanto al volumen de negocio, el total de la inversión crediticia a clientes ascendió a 2.436 millones de euros, un 6,38%, más que a la misma fecha de hace un año. Los recursos cerraron este primer trimestre en 3.804 millones de euros un 7,85% más que en el 2019.
En general la Caja mantuvo el mismo dinamismo en cuanto a la actividad crediticia. Formalizó un total de 3.439 operaciones de préstamo y crédito por un importe superior a los 93 millones de euros de los que corresponden al sistema productivo más de 34 millones de euros. Destaca el dato de las operaciones de inversión destinadas a nuevos clientes que alcanzan el número de 854.
La generación de negocio de la Caja continuó dando muestras de fortaleza pese al impacto de una menor actividad que empezó a dejarse notar al final del periodo. La captación de nuevos clientes mostró su dinamismo durante el primer trimestre, un total de 4640 personas iniciaron su actividad financiera con laCaja. De de ellas, 3562 eran nuevos hogares, 403 autónomos y 675 empresas.
Soluciones financieras frente al Covid19
Caja Rural de Asturias se ha sumado a las soluciones financieras impulsadas por el Gobierno nacional y autonómico frente al Covid 19 y mantiene activas un amplio conjunto de iniciativas propias de financiación para mitigar el impacto económico que está generando entre alguno de sus clientes la actual situación de pandemia. El apoyo financiero a los clientes y el social a través de la Fundación son los pilares fundamentales en este momento para la Entidad.
Por último, la Caja ha potenciado sus canales digitales con la finalidad de reforzar la atención y adaptar la relación con sus clientes al nuevo entorno si bien mantuvo el 100% de la red de sucursales abiertas para mantener la mayor normalidad posible y con el menor riesgo para sus empleados y clientes.