En Asturias los pequeños frutos y concretamente el arándano, se están convirtiendo en una alternativa rentable elegida por los agricultores. La región cuenta con 300 hectáreas dedicadas al cultivo del arándano. El SERIDA hace muchos años que investiga sobre ello, siendo pioneros en el estudio de los injertos en el arándano. Juan Carlos Rubio nos habla de ello.