Almacenes Blanco de La Colorada (Navia) es el distribuidor para Asturias de los productos Cid Lines
Por Marta Isabel Vicente Martínez, técnico veterinario en Gaherproga SL
La higiene es uno de los factores más importantes de la producción lechera. La empresa belga Cid Lines ofrece productos de alta calidad para garantizar la higiene absoluta en cada aspecto de las buenas prácticas lecheras con soluciones innovadoras para la limpieza de cobertizos para terneros, establos, salas de ordeño y equipos, pezuñas y ubres. En Asturias Almacenes Blanco es la empresa distribuidora de la marca.
En las ganaderías de vacuno de leche son fundamentales el bienestar animal y la salud de la ubre. Hoy en día esto cobra importancia ya que los márgenes de la producción son pequeños y las exigencias de los consumidores, en cuanto a términos de calidad y seguridad alimentaria, son cada vez mayores. Estos dos puntos adquieren una mayor importancia cuando las vacas entran en la sala de ordeño, ya que es en ese momento, donde nosotros como ganaderos podemos influir de una manera importante con un buen manejo.
La mamitis es un proceso producido por bacterias que desencadenan una reacción inflamatoria en la ubre, lo que supone que ésta no esté sana, produciéndose de este modo un aumento del Recuento de Células Somáticas (RCS). Dicho aumento del RCS va afectar al animal, el cual va a disminuir su bienestar, al tener procesos de inflamación, y a nuestra rentabilidad como explotación, ya que se va a producir una disminución de la producción, aumento en gastos de medicamentos y pérdida de primas por calidad, por ello, para prevenir la aparición de mamitis es necesario minimizar el número de bacterias que entran en la ubre. La estrategia clave es conseguir un ordeño limpio y técnicamente eficiente, así como una explotación limpia y unos animales sin estrés, los cuales puedan responder inmunitariamente a las bacterias presentes sin desarrollar enfermedad.
Es fundamental que nuestros animales vayan a la sala de ordeño relacionándolo con un estímulo positivo para ellas, por ello es necesario un correcto manejo desde que las vacas se van a buscar para ser ordeñadas. Una vez allí, una buena rutina de ordeño va a marcar la diferencia entre tener un ganado con una buena salud de ubre, o no tenerlo y por lo tanto producir una leche sana y de calidad.
La correcta rutina de ordeño debe comenzar despuntando a la vaca, este paso nos va a permitir detectar mamitis, eliminar los primeros chorros de leche, los cuales suelen contener un mayor número de células inflamatorias, así como empezar a preparar al animal para una correcta eyección de la leche. El siguiente paso, es hacer un predipping para humedecer la piel del pezón y desinfectar, desde CID LINES, apostamos por una espuma concentrada en base a ácido láctico (KENOPURE) que nos garantiza una desinfección en 30 segundos, con un gran efecto detergente, que permite en el paso siguiente donde haremos el secado y limpieza del pezón eliminando de una forma fácil la materia orgánica. Hay que tener en cuenta que unos pezones y un esfínter limpios y desinfectados reducen enormemente el riesgo de infección. Una vez limpios y secos los pezones pondremos las pezoneras para empezar a extraer la leche.
Es importante que desde que tocamos la vaca por primera vez, hasta que ponemos las pezoneras, pasen al menos 90 segundos ya que es el tiempo necesario para que la vaca quede correctamente estimulada, esto va a garantizar un ordeño rápido y placentero para los animales, lo que va a suponer una mejora en el bienestar animal y sobre la salud de la ubre, evitando sobreordeños previos a la eyección de la leche que se producen cuando los animales no tienen una buena estimulación.
Una vez ordeñada la vaca, elegiremos un sellador que se adecue a nuestras necesidades, en función de los problemas que tengamos en nuestra explotación, para ello CID LINES, ha desarrollado una gama de productos de alta calidad con un gran rendimiento por animal, además de un excelente cuidado de la piel del pezón, que nos van a permitir garantizar la salud de la ubre de nuestras vacas.
Después del ordeño, es aconsejable que las vacas permaneciesen de pie al menos 30 minutos, ya que durante este tiempo, la apertura del canal del pezón se cerrará, reduciendo el riesgo de infección de la ubre cuando vuelven a tumbarse. Una manera sencilla de conseguir esto es adaptando las horas de echar y arrimar comida con el ordeño.
Por tanto, un manejo tranquilo y protocolarizado, como se ha explicado anteriormente, es esencial cuando se trabaja con vacas de leche, así como elegir productos que nos garanticen una gran calidad y seguridad. De este modo haremos nuestra ganadería más eficiente y rentable.