Casa Vicente en Villajulián (Tinero) es una ganadería de tradición familiar que actualmente se gestiona a través de una sociedad formada por el joven Jonathan Fernández Fuertes y sus padres, contando con el apoyo incondicional de los abuelos. Tienen 140 reses, de las cuales alrededor de 75 están en producción. Entregan desde hace más de 40 años la leche a Nestlé y tienen una producción media de 32 litros por vaca y día. Hace tres meses que cuentan con nuevas instalaciones de estabulación libre y una sala de ordeño de espina de pescado con 16 puntos. Han mejorado tanto el bienestar animal como el de ellos mismos, ya que ahorran dos horas diarias por ordeño. El caso de Jonathan no es el más habitual, con 18 años recién cumplidos decidió continuar con la ganadería y de eso ya hace una década, apostando ahora con un Plan de Mejora por la modernización y profesionalización de su ganadería.
-¿Cómo se ha producido el cambio de estabulación?
-Llevamos dos meses y medio en las nuevas instalaciones. Al principio las vacas notaron el cambio pero se adaptaron rápidamente y como nos coincidió con días de calor, algunas se secaron. Pasaron de estar amarradas en la cuadra con ordeño en plaza a tener una estabulación libre, con cubículos de arena, patios amplios, ordeño en sala… y ha mejorado mucho su propio bienestar con más movilidad y amplitud. Para manejar este volumen de vacas es más cómodo tenerlas sueltas.
-¿En qué han notado ustedes la mejora?
-Nos decidimos por una sala con 16 puntos en espina de pescado de ordeño trasero. Cuenta con medición y retirada individual. Además podemos ver las curvas de flujo de leche de cada vaca para poder aplicar un refuerzo de estimulación mecánica a los animales que les cueste más bajar la leche. Con el ordeño antiguo tardábamos más de tres horas en ordeñar por la mañana y otras tres por la tarde y pasamos a tardar solo una hora por ordeño. Y la diferencia de tener que agacharse para ordeñar a ordeñar de pie es muy grande. Podemos decir que casi se adaptaron antes las vacas que nosotros a la nueva nave y el nuevo sistema, y en poco tiempo empezaron a aumentar producción.
-Su ganadería cuenta con certificación, háblenos de ello.
-Desde hace seis años tenemos la certificación de Nestlé, lo que exige una serie de registros de todo lo que haces en la explotación con control de fitosanitarios y medicamentos, y la higiene, ya que exige una limpieza en términos generales del establo, no sólo del producto final.
-¿Y la alimentación?
-Las raciones llevan silo de maíz y silo de raigrás que producimos nosotros y una mezcla de pienso que compramos en un almacén de Campiello. Hemos comenzado a realizar un punteo en 2 boxes automáticos con un pienso específico de Nanta. Se programa el punteo según días en leche y producción. Antes la ración llevaba diez kilos de pienso y ahora estamos con ocho para seguir reduciendo, y vamos compensando con el punteo de pienso Nanta según la producción de cada vaca. Y los animales tienen alfalfa a libre disposición. También hacemos hierba seca para la recría.
-¿Qué sistema informático utilizan?
-Utilizamos el programa Dairy Plan de GEA, las vacas están identificadas con podómetros que registransu actividad para diagnosticar mejor los celos, el programa nos avisa de las vacas en celo para poder inseminarlas en el momento óptimo.Se registra todo, las enfermedades y los tratamientos de cada vaca, como los datos de reproducción desde el parto, cubriciones o inseminaciones, test de preñez, secados… El programa nos proporciona unos listados que te ayudan a gestionar el trabajo de reproducción como las vacas para el test de preñez, las que no salen en celo o las que tenemos que secar. También nos da alarmas de animales que han producido menos leche o que esta leche tiene más conductividad para que controlemos si tienen algún problema de mamitis u otras enfermedades. Debido a ello, en células somáticas hemos mejorado mucho, higiene ya la teníamos antes, pero pasar de cama de goma a cama de arena que cambiamos dos veces al día ha resultado muy positivo. El programa también calcula el pienso de cada vaca según su producción y días en leche. Podemos ver un en un listado cuantas veces entra a comer cada vaca y si dejan algo de pienso.
-¿Apuestan por la genética?
-Siempre buscamos buenos animales, que van a producir más leche y a funcionar mejor en la cuadra. Buscamos sobretodo calidad, que sean animales con buenas características en ubres, patas, incluso ahora ya se mira mucho el tema de la longevidad de los animales.
-¿Disponen de mucha maquinaria?
-La necesaria para realizar todos los trabajos salvo lacosechade maíz que subcontratamos, el resto hacemos nosotros. Tenemos 32 hectáreas, 12 hectáreas sembradas de maíz, y en invierno de raigrás, cuatro hectáreas para hierba seca y el resto de raigrás.
-¿Algún problema por resolver?
-Sí, me preocupa el tema del purín. En la antigua cuadra producíamos 40.000 litros a la semana y actualmente más. Aunque se utiliza para el abono de las fincas, hemos construido una fosa de 1.700.000 litros para almacenarlo desde el cultivo del raigrás al cultivo de maíz. El problema que veo es que en un futuro llegará un momento que no tendré dónde echarlo. Siempre vas a más volumen de ganado y tendremos el mismo problema. De momento estamos aguantando así.
-¿Por qué decidió dedicarse a la ganadería? ¿Cómo ve el futuro?
-Es una forma de vida en la que trabajas para ti. Las nuevas instalaciones se han realizado con un plan de mejora y el futuro lo veo un poco incierto, pero hay que ser positivos y hacer las cosas bien, lo mejor que puedas, dependiendo cómo lo hagas obtendrás los resultados. En Tineo hay gente joven que apuesta por el campo, más por la carne que por la leche. Me llama la atención que en viajes que hacemos, veo que en otros países se fomenta el consumo de productos lácteos, sobretodo de leche y mantequilla, y aquí no veo interés por ello, podían ayudar un poco.
